Mediante modelos de análisis, el orientador del 2021 puede medir el futuro de sus estudiantes para ayudarlos a decidir sus estudios y su profesión.
Llega, como cada año, el momento en el que miles de estudiantes deberán decidir sus estudios superiores. Los hay que decidirán por sus hobbies, otros según las materias que más les gustan o por la influencia del entorno.
Para decidir los estudios un estudiante hace la orientación, que es un proceso de toma de decisiones sobre su futuro académico y profesional.
La decisión de su futuro la debe tomar él, aunque nada le obliga a hacerlo solo. Es por eso que en el momento de tomar decisiones, el orientador es clave, aportando al alumno y a la familia: seguridad, tranquilidad y confianza.
Sin embargo los tiempo cambian, y lejos quedan ya los test vocacionales de toda la vida. El orientador del 2021 utiliza herramientas científico tecnológicas, cuyos motores son los algoritmos y la inteligencia artificial, y trabaja mediante modelos de análisis que le permite crear escenarios hipotéticos de futuro, y es que el futuro no se puede asegurar, pero si que se puede medir.
Medimos el futuro con inversiones en el mercado de valores. Lo hacemos con el pronostico del tiempo e incluso lo hacemos cuando conectamos el navegador del coche, que nos dice el tiempo que vamos a tardar en ir de casa a la oficina.
El orientador del 2021 utilizá modelos de análisis descriptivos, que cuantifican las relaciones entre los datos de manera que son utilizados para clasificar patrones. Eso permite conocer el ADN profesional del estudiante para que sepa en que perfiles profesionales tiene más encaje.
Utiliza modelos predictivos que permiten evaluar la probabilidad de que un estudiante tenga el mismo rendimiento en una muestra diferente. Eso permite, por ejemplo, dependiendo de la nota del estudiante en 4º ESO, saber como será su nota de bachillerato o de selectividad respecto al histórico de miles de estudiantes. Permite al estudiante obtener una nota proyectada que le anticipa el esfuerzo en el bachillerato y le asegurará el acceso al grado que quiere alcanzar.
Utiliza también modelos de decisiones según la técnica de dinámica de sistemas de Jay Forrester, que describen la relación entre todos los elementos de una decisión, es decir, todos los datos conocidos incluyendo los resultados de los modelos descriptivos y predictivos. Esto hace que el estudiante vaya tomando decisiones durante el proceso de orientación, con toda la información, para decidir su futuro académico y profesional.
Zeno Quantum pone a disposición de los orientadores de los colegios ZQtech, la herramienta cientifico tecnológica más avanzada del mundo en el campo de la orientación, que permite a un orientador medir el futuro de un estudiante para ayudarlo a tomar las decisiones de su futuro.
Puedes saber más aquí.
Diego Delgado, CEO Zeno Quantum
Comments